La reciente muerte de un niño por difteria, sumada a la confirmación de cuatro casos positivos este año en la República Dominicana, ha fijado la atención hacia la enfermedad producida por la bacteria Corynebacterium diphtheria.
La difteria es una infección de alto contagio que afecta principalmente las vías respiratorias superiores (nariz, amígdalas, faringe, laringe) y piel, con el riesgo de una posible obstrucción.
En casos severos, la bacteria genera una toxina que da lugar a una espesa placa gris o blanca en el fondo de la garganta, que dificulta la respiración o la deglusión de alimentos.
Además, el producto tóxico podría provocar fallos en órganos como el corazón, hígado y riñón, en caso de expandirse al torrente sanguíneo.
La difteria es mortal en 5-10% de los casos, con una tasa de mortalidad más alta en niños pequeños, según datos de la Organización Panamericana de la Salud.
Esta infección puede trasmitirse por secreciones nasales o faríngeas de una persona contagiada, a través de la tos y el estornudo o por contacto con artículos contaminados con la bacteria.
Entre los principales factores de riesgo de contagio están la falta de vacunación, situaciones ambientales de hacinamiento y la higiene deficiente.
BROTE EN REPÚBLICA DOMINICANA
Según datos, el último brote de difteria en el país se registró en los primeros cuatro meses de 2021, cuando fueron notificados 22 casos probables de la enfermedad, de los cuales 12 resultaron positivos.
De los casos confirmados entre las 15 primeras semanas epidemiológicas del referido año, 9 eran de sexo masculino, entre 1 y 14 años de edad. Ninguno tenía antecedentes de vacunación contra la bacteria.
En igual período, además se notificaron unas 9 muertes confirmadas por cultivo, cuyas edades rondaban entre los 3 y 14 años.
Monte Plata, Santo Domingo, San Cristóbal, Peravia, Bahoruco y Hato Mayor fueron las provincias en las que se presentaron los casos confirmados de difteria para 2021, siendo la primera (Monte Plata) donde se registró un mayor número de defunciones (4 fallecimentos).
En ese mismo año, a la semana epidemiológica 52 se registraban 18 casos confirmados, incluidas 12 defunciones.
Para entonces, las autoridades de salud emitieron una alerta epiedemiológica en la que exhortaban a la población general a estar al día con el esquema de vacunación en niños y adultos.
CASOS ACTUALES
En este 2023, el acumulado de casos sospechosos de difteria es de 18, de acuerdo al último boletín de la Dirección General de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública.
El informe No. 52 apunta que de este total, 4 resultaron positivos a Corynebacterium diphtheriae. Mientras, 10 fueron negativos y 2 están pendientes de procesamiento de las muestras. A los dos restantes no se le tomó muestra.
Hasta el momento, solo se registra el fallecimiento de un niño de cuatro años, procedente de Duvergé, quien presentó el cuadro clínico a la difteria y dio positivo a la enfermedad.
El Ministerio de Salud Pública informó que quienes han dado positivo a la difteria este año son personas de origen haitiano y no estaban vacunados contra la enfermedad.
“Desde que aparece un caso se hace un rastreo para evitar que se produzcan brotes y se acude a la zona para contener la patología mediante la aplicación de vacunas y la investigación de la situación a través de la Dirección General de Epidemiología” afirmó en rueda de prensa el viceministro de Salud Colectiva, Eladio Pérez.
VACUNACIÓN
Como evidencian los antiguos y recientes casos, toda persona no vacunada contra la difteria está en una alta situación de riesgo de contraer la enfermedad.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), una ronda básica de 3 dosis, administradas en el curso del primer año de vida, sienta las bases para adquirir inmunidad vitalicia.
“Los programas de inmunización deben asegurarse de que más adelante, durante la niñez o adolescencia, cada cual reciba otras 3 dosis de refuerzo de una vacuna que contenga la anatoxina diftérica. A cualquier edad, toda persona que no esté vacunada contra la difteria, o que lo esté solo parcialmente, debe recibir las dosis necesarias para completar la vacunación” señala la OMS.
En este sentido, el esquema de inmunización en la República Dominicana contempla la aplicación de la primera dosis de vacuna contra la difteria a los dos primeros meses de nacimiento del niño o niña, seguido de una segunda dosis a los 4 meses. La tercera se administra a los 6 meses.
En tanto, las próximas tres dosis de refuerzo, se colocan entre los 18 meses y 14 años de edad.
De acuerdo con las autoridades de salud, la República Dominicana tiene una cobertura de vacuna contra la difteria por encima del 90 por ciento.
Además, cuenta con 1,400 puestos fijos de vacunación distribuidos en todo el país, con las inmunizaciones disponibles y gratuitas, a través del Programa Ampliado de Inmunización (PAI) con todos sus componentes.
