Las elecciones generales de Ecuador y el balotaje de las presidenciales en Guatemala están previstos para el próximo domingo 20 de agosto. Ambos eventos están concitando interés y expectativas más allá de los límites territoriales de estos países, por todos los acontecimientos que se han presentado durante el desarrollo de la campaña electoral, algunos lamentables, irreparables y que han sentado precedentes.

En tal sentido, el último tramo del proselitismo político electoral de Ecuador está marcado por la violencia que ejerce el crimen organizado transnacional que tiene ramificaciones en ese país, en el que acciona dentro y fuera de las cárceles hasta imponer una especie de statu quo. El asesinato a tiros del candidato presidencial Fernando Villavicencio es un hecho sin precedentes y que forma parte de la andanada de los grupos criminales que ejercen la intimidación.

Villavicencio, periodista de trayectoria reconocida, fue el aspirante presidencial del centroderechista Movimiento Construye, que asumió como elementos centrales de su discurso la lucha contra el narcotráfico y la corrupción, este último tema abordado con frecuencia dentro de sus trabajos de investigación periodística. De acuerdo a diversas encuestas, era el segundo en intención de votos.

A raíz del suceso, el Movimiento Construye designó al periodista Christian Zurita como su candidato a la Presidencia de la República, en reemplazo de Villavicencio, de quien fue amigo personal, y con quien trabajó reportajes y libros relacionados a temas de crimen organizado, corrupción y narcotráfico.

En ese tenor, una encuesta actualizada de la firma Click Report publicada el domingo 13 de agosto por el periódico digital La República, con el título “Encuestas Ecuador 2023: ¿quiénes son los candidatos con mayor intención de voto para las elecciones?”, plantea que la candidata correísta, Luisa Gonzáles, lidera las preferencias electorales con un 29,6%; seguida de los aspirantes de la alianza de centroizquierda Claro que se Puede, Yaku Pérez, con 14,42%; y de la centroderechista coalición Actuemos, Otto Sonnenholzner, con 12,36%.

Está en perspectiva como se rearticulará el panorama electoral con la llegada al ruedo político de Christian Zurita, si será asimilado por la militancia del Movimiento Construye y el segmento de los indecisos, que ronda entre el 41% y el 9%, de acuerdo a encuestas registradas en el Consejo Nacional Electoral (CNE), cuyos resultados fueron reseñados por el periódico digital El Universo, en un trabajo titulado “Así van los candidatos presidenciales a doce días de las elecciones anticipadas del 20 de agosto, según cuatro encuestas de intención de voto”, publicado el 8 de agosto, justo un día antes del asesinato de Villavicencio, por lo que la brecha puede ampliarse o reducirse en la medida en que se aproxime el proceso comicial, aunque todo parece indicar que habrá un escenario de segunda vuelta, que sería celebrada el domingo 15 de octubre.

En lo referente al balotaje de Guatemala, la contienda la encabezan el candidato del socialdemócrata Movimiento Semilla, Bernardo Arévalo, quien marca como favorito en las encuestas más reputadas, entre ellas, Cid Gallup, que en su entrega del 3 de agosto estableció que tiene un 67 % de las preferencias electorales; mientras que, la aspirante del centrista partido Unidad Nacional la Esperanza (UNE), Sandra Torres, cuenta con un distante 37%.

La segunda vuelta está precedida por una crisis política, tras la denuncia de fraude de 9 partidos y el posterior reconteo de las actas, provocando estallidos sociales; la fallida iniciativa de la cuestionada Fiscalía (Ministerio Público) de ilegalizar el Movimiento Semilla, una movida criticada por entidades dentro y fuera de los linderos guatemaltecos, porque era un intento de sacar del tablero electoral a Arévalo, que fue la gran revelación por el porcentaje que sacó, contrario a todas las encuestas y porque se perfila como un candidato con ideas y planteamientos diferentes a los imperantes dentro del sistema, con su discurso contra la corrupción; y las disertaciones tendentes a la discriminación que en última instancia ha asumido Sandra Torres.

La tensión y el temor de que no se acaten los resultados está latente en importantes segmentos de la sociedad, más aún cuando trasciende que el cerco se le estrecha al actual presidente, Alejandro Giammattei, luego que el Departamento de Estado de Estados Unidos incluyera en su más reciente Reporte de Actores Corruptos y Antidemocráticos de Centroamérica, a figuras vinculadas al entorno cercano del dignatario.

Todo parece indicar que la tensión puede influir en los votantes, tomando en cuenta la posibilidad de que se genere una violencia electoral en un país donde prevalece el descrédito hacia los políticos y los partidos del sistema, que se refleja en el tradicional voto de castigo y los amplios niveles de abstención electoral, que en la primera vuelta fue la gran ganadora, con un 41%.

Posted in Opiniones

Más de opiniones

Más leídas de opiniones

Las Más leídas